Con toda esta información sobre cómo publicar en un blog, literalmente cualquiera podrá hacerlo, siempre y cuando conozca a fondo el tema sobre el que escribirá. Y ya que eres un experto en tu industria, no hay razón alguna por la que no puedas sentarte a diario a producir un excelente post.
Cómo redactar un post: la fórmula sencilla que debes seguir
Paso 1: Entiende a tu audiencia.
Antes de empezar a escribir, asegúrate de conocer con claridad la audiencia a la que te dirigirás. ¿Qué información le interesa saber? ¿Con qué se identifica? Aquí es donde crear tus buyer personas (perfiles de consumidores) resulta útil. Considera lo que sabes acerca de tus buyer personas y sus intereses cuando selecciones un tema para tu post.
Por ejemplo, si tus lectores son de la “generación del milenio” y buscan emprender su propio negocio, probablemente no necesites proporcionarles información esencial sobre las redes sociales, ya que la mayoría de ellos conoce muy bien este aspecto. Sin embargo, sería recomendable que les dieras información sobre cómo ajustar su difusión en las redes sociales para pasar de un enfoque más informal y personal a uno más comercial de forma profesional y enfocado en las redes sociales. Ese tipo de ajuste es lo que te separa de publicar material genérico en tu blog a publicar lo que tu audiencia realmente desea (y necesita) escuchar.
¿No tienes buyer personas (perfiles de consumidores) para tu empresa? Te ofrecemos algunos recursos útiles para que te pongas en marcha:
- Cómo crear buyer personas (perfiles de consumidores) para tu empresa [plantilla gratuita]
- Post: Cómo crear buyer personas (perfiles de consumidores) detallados para tu empresa
- MakeMyPersona.com [herramienta gratuita]
Paso 2: Comienza por seleccionar un tema y un título provisional.
Antes de comenzar a escribir, necesitas elegir un tema para tu post. El tema puede ser general al principio. Por ejemplo, si eres plomero, podrías comenzar a pensar en que quieres escribir sobre los grifos que tienen fugas. Después, podrías idear algunos títulos provisionales diferentes; es decir, iteraciones o distintas formas de abordar el tema para ayudarte a enfocar tu redacción. Por ejemplo, podrías decidir limitar tu enfoque a algo como “Herramientas para reparar grifos con fugas” o “Causas comunes de fugas en grifos”. Un título provisional es específico y guiará tu post para que puedas comenzar a escribir.
Tomemos un post real como ejemplo: “Cómo escoger un tema relevante para tu siguiente post” (post en inglés). Adecuado, ¿no es cierto? En este caso, el tema era, probablemente, la publicación en blogs. El título provisional podría haber sido algo como: “Proceso para seleccionar el tema de un post”. El título final terminó siendo “Cómo escoger un tema relevante para tu siguiente post”.
¿Notas la evolución del tema al título provisional, y luego al título final? Aunque el título provisional no acabe siendo el título definitivo (hablaremos sobre esto en un instante), aun así proporciona suficiente información para que puedas centrar tu post en un tema más específico en lugar de un tema genérico o abrumador.
Si no se te ocurren ideas, no te pierdas este post (post en inglés) de mi colega Ginny Soskey. En este post, Soskey describe paso a paso un proceso práctico para convertir una idea en muchas. Al igual que en el ejemplo anterior de los “grifos con fugas”, ella sugiere “repetir viejos temas para pensar en nuevos temas únicos y atractivos”. Para ello, podemos:
- Cambiar el alcance del tema
- Ajustar el plazo de tiempo
- Elegir una nueva audiencia
- Adoptar un enfoque positivo/negativo
- Presentar un nuevo formato
Paso 3: Escribe una introducción atractiva.
Ya explicamos el tema sobre cómo escribir introducciones cautivadores en “Cómo escribir una introducción [consejo rápido]” (post en inglés), pero volvamos a revisarlo, ¿te parece?
Primero, tenemos que captar la atención del lector. Si pierdes al lector luego de que lea los primeros párrafos o hasta las primeras oraciones de la introducción, dejará de leer incluso antes de darle una oportunidad a tu post. Puedes hacerlo de distintas formas: cuenta una historia o un chiste, sé empático o cautiva al lector con un hecho o estadística interesante.
Después describe el propósito del post y explica cómo se abordará un problema que el lector podría estar experimentando. Esto le proporcionará una razón para seguir leyendo y creará una conexión sobre cómo tu post puede ayudarlo a mejorar su trabajo o su vida. Aquí tenemos el ejemplo de un post que creemos que hace un buen trabajo capturando la atención de los lectores de inmediato.
Paso 4: Organiza tu contenido.
A veces, los posts pueden tener una cantidad de información abrumadora tanto para el lector como para el escritor. El truco es organizar la información para que los lectores no se sientan intimidados por la longitud o la cantidad de contenido. Puedes organizar la información de varias formas: secciones, listas, consejos o lo que sea más adecuado en tu caso. ¡Pero el post debe estar organizado!
Echémosle un vistazo al post “Cómo usar Snapchat: una mirada detallada sobre la estrategia para Snapchat de HubSpot” (post en inglés). Hay mucho contenido en este post, por lo que lo desglosamos en distintas secciones usando los siguientes encabezados: Cómo configurar tu cuenta de Snapchat, Snaps vs. historias: ¿cuál es la diferencia?, y Cómo usar Snapchat en la empresa. Las secciones se separaron en subsecciones, las cuales están más detalladas y también hacen que el contenido sea más fácil de leer.
Para terminar este paso, todo lo que necesitas es crear un borrador de tu post. De esta forma, antes de que empieces a escribir, sabrás qué puntos quieres cubrir y cuál será el mejor orden para llevarlo a cabo.
Paso 5: ¡Escribe!
El siguiente paso, pero no el último, es escribir el contenido en sí. No podíamos olvidarnos de eso, desde luego.
Ahora que ya tienes tu borrador/plantilla, estás listo para llenar los espacios en blanco. Usa tu borrador como una guía para asegurarte de detallar todos los puntos, según sea necesario. Escribe sobre un tema que conozcas y, si fuera necesario, investiga un poco para reunir más información, ejemplos y datos que respalden tus puntos. No te olvides de proporcionar la atribución adecuada (post en inglés) cuando incorpores fuentes externas. ¿Necesitas ayuda para encontrar datos precisos y atractivos para usar en tu post?Consulta este resumen de fuentes, desde Pew Research hasta las tendencias de búsqueda de Google.
Si descubres que tienes problemas para enlazar las oraciones, no eres el único. Encontrar tu “camino” puede ser realmente desafiante para muchas personas. Por fortuna, hay cientos de herramientas que puedes aprovechar para mejorar tus dotes de redacción. A continuación, te mostramos algunas:
- Power Thesaurus: ¿No te sale una palabra? Power Thesaurus es una herramienta de subcontratación masiva voluntaria que sugiere a los usuarios miles de alternativas de palabras que provienen de una comunidad de escritores.
- ZenPen: Si tienes problemas para mantenerte enfocado, dale un vistazo a esta herramienta de escritura libre de distracciones. ZenPen crea una “zona de redacción” minimalista diseñada para ayudarte a pensar solo en las palabras sin tener que lidiar con cuestiones de formato de inmediato.
- Cliché Finder: ¿Sientes que tus palabras podrían estar sonando un poco cursi? Identifica instancias donde puedas ser más específico usando esta herramienta práctica de clichés.
Paso 6: Revisa y corrige tu post y arregla el formato.
Todavía no has terminado, ¡pero estás a punto de hacerlo! El proceso de revisión es una parte importante de los blogs; no lo descuides. Pídele a un compañero que sepa de gramática que revise y corrija tu post. Asimismo, considera crear una lista con la ayuda de la Lista básica de cosas por hacer en una revisión (post en inglés). Y si buscas refrescar tus propias habilidades de autoedición, mira estos posts útiles para obtener trucos y consejos que te ayudarán a ponerte en marcha:
- Confesiones de un editor de HubSpot: 11 consejos de edición de la mano de los expertos
- Cómo convertirse en un editor más eficiente: 12 maneras de acelerar el proceso editorial
- 10 correcciones sencillas para mejorar al instante cualquier texto
Cuando estés listo para revisar las cuestiones de formato, ten en cuenta lo siguiente.
Imagen principal
Asegúrate de escoger una imagen visualmente atractiva y relevante para tu post. Debido a que las redes sociales prefieren procesar el contenido con imágenes, ahora los elementos visuales tienen más responsabilidad que nunca en el éxito del contenido de tu blog que compartes por las redes sociales. De hecho, se ha demostrado que el contenido con imágenes relevantes recibe un 94% más de vistas que el contenido sin imágenes relevantes.
Para ayudarte a seleccionar una imagen para tu post, lee “Cómo seleccionar la imagen perfecta para tu siguiente post” (post en inglés) y presta mucha atención a la sección sobre derechos de autor.
Apariencia visual
A nadie le gusta un post feo. Y no son solo las imágenes las que hacen que un post sea visualmente atractivo; también importa el formato y la organización del post.
En un post con el formato y atractivo visual adecuados, notarás que se utilizan encabezados y subtítulos para dividir bloques grandes de texto, y estos encabezados siguen un mismo estilo. He aquí un ejemplo de esto:
Asimismo, las capturas de pantalla siempre deberían tener un borde definido y similar (observa la captura de pantalla anterior si deseas ver un ejemplo), para que no se vean como si estuvieran flotando en el espacio. Y este estilo debería respetarse siempre en todos los posts.
Mantener esta coherencia hace que tu contenido (y tu marca) luzcan más profesionales y atractivas a la vista de los lectores.
Temas/etiquetas
Las etiquetas son palabras clave específicas y públicas que describen un post. También permiten a los lectores buscar más contenido relacionado con la misma categoría en tu blog. Evita agregar una larga lista de etiquetas en cada post. En lugar de eso, analiza muy bien tu estrategia de etiquetado. Piensa en las etiquetas como si fueran “temas” o “categorías” y selecciona de 10 a 20 etiquetas que representen todos los temas principales que deseas abarcar en tu blog. Luego, apégate a ellas.
Paso 7: Inserta una llamada a la acción (CTA) al final.
Al final de cada post, debes colocar una CTA que indique lo que deseas que haga el lector a continuación, ya sea suscribirse a tu blog, descargar un ebook, registrarse para un webinar o evento, leer un artículo relacionado, etcétera. En general, se considera que las CTA benefician al profesional del marketing. Los visitantes leen tu post, hacen clic en la CTA y, tarde o temprano, generas una oportunidad de venta. Pero las CTA también son un recurso valioso para las personas que leen tu contenido. Usa tus CTA para ofrecer más contenido similar al tema del post que acaban de leer.
En el post “Qué publicar en Instagram: 18 ideas en fotografías y video que te darán una chispa de inspiración” (post en inglés), por ejemplo, los lectores reciben ideas prácticas para crear contenido valioso en Instagram. Al final del post, hay una CTA que insta a los lectores a descargar una guía completa para usar Instagram en las empresas:
¿Ves cómo todos ganamos con esta táctica? Los lectores que desean saber más tienen la oportunidad de hacerlo y la empresa recibe una oportunidad de venta a la que le puede dar seguimiento… ¡alguien que incluso podría convertirse en un cliente! Aprende más sobre cómo elegir la CTA correcta para cada post en este artículo (en inglés). Y no te pierdas esta colección de CTA inteligentes que te inspirarán a crear los tuyos.